Cenicienta era una hermosa y bondadosa joven, a quien su cruel madrastra y sus dos hermanastras obligaban a ocuparse de las labores más duras del palacio, como si fuera la última de las criadas.
Cenicienta era una hermosa y bondadosa joven, a quien su cruel madrastra y sus dos hermanastras obligaban a ocuparse de las labores más duras del palacio, como si fuera la última de las criadas.